“La Tierra, un planeta brillante”
“La Tierra, un planeta brillante”
Que la observación de nuestros cielos se ha hecho más compleja, es verdad. Hoy en día, ya seamos astrónomos aficionados o no, el mirar el cielo se torna problemático, sobre todo si utilizamos equipos para ello. Claro que de todas formas nos podemos trasladar a lugares en donde no haya elementos que dificulten nuestra labor de observación, pero, a raíz de la pandemia y todo lo que eso conlleva, nos ha hecho – prácticamente – confinarnos en nuestras casas. Si a esto le sumamos anteriormente el no tener un vehículo de traslados, la situación se torna aún más difícil, por ende, el buscar algún lugar en nuestro lugar de residencia en donde no exista demasiada contaminación lumínica es primordial si queremos darnos ese placer en la contemplación.
La luz artificial es una problemática actual, creo que – a pesar de algunas medidas que restrinjan su alcance – esto seguirá avanzando irremediablemente. Uno de los principales factores que incrementa la intensidad lumínica es la publicidad, a pesar de que existen protocolos para esto, hoy vemos como en algunas autopistas de nuestras ciudades, existen esas enormes pantallas Led con alto brillo. Dejo claro que no tengo nada en contra de la publicidad, por si las dudas. Estas mismas pantallas iluminan una gran porción de metros a la redonda, incluso han surgido algunos reclamos por el uso cercano al transito vehicular ya que podrían causar accidentes por su alto grado de brillo en ciertos momentos. Pero no solo altera lo que es el normal transitar en ciudades, sino que afecta a la naturaleza misma. De esto último doy fe en donde en algunas plazas, debido a la cantidad de luminarias, las aves, de habito diurno, hacen en la noche su vida “normal” yendo de un lado hacia otro. No haré hincapié en lo mucho que afecta a nuestro organismo porque dejare al final de esta nota algunos enlaces para que usted – amiga y amigo – puedan enterarse de estas situaciones que nos afectan.
Lo otro, son las mismas luminarias publicas que, en algunos diseños, “esparcen” mayor luminosidad en el entorno. Muchas personas dirán que esta muy bien porque están creadas para seguridad, y tienen razón porque la delincuencia no da tregua, claro que esta luminosidad no es sinónimo de un gran resguardo. Pero en la actualidad no solo las luminarias publicas generan esta contaminación, sino también algunos de los focos instalados en algunas propiedades, ya sea en patios o edificios. Es decir que la regulación es casi nula en cuanto a esto último, mientras más ilumine, mejor, obviamente y es entendible. Relativo a lo que son ciertos reglamentos, existen algunos parámetros que son convenientes conocer, sobre todo al país que nos convoca, Chile, aunque bien pueden darse en diversos lugares de los continentes. Revisemos.
Mapas de contaminación lumínica, Chile.
Me recuerdo que, en la década del ochenta, cuando en mi germinaba la semilla de la observación de planetas y estrellas, el corte inesperado del suministro eléctrico producto del ambiente político que se vivía en aquel momento (cadenazos a los cables del tendido y uno que otra torre derribada durante las protestas), la oscuridad se dejaba caer sobre gran parte de algunas regiones. Es más, tengo patente el recuerdo de uno de mis abuelos en donde cerca de las 22:00 horas, dijo: “salgan, comenzó la invasión”, aludiendo, jocosamente, a la llegada de los marcianos, eso era porque durante un corte de luz se veían miles de estrellas en una noche sin Luna. Una maravilla, pero también no dejaba de ser intimidante. Es ahí que quedé fascinado con la magnificencia del manto estelar, veía cúmulos de estrellas en donde nunca creí ver.
Quizás pueda sonar ambicioso o poco cuidadoso con todos los problemas que traen consigo los cortes del suministro eléctrico, sobre todo de la calle, pero es bueno volver a ver las estrellas en su plenitud sin ese “molesto” foco encima. Bueno, es parte de nuestro desarrollo tecnológico que acarrea avances para nuestra comodidad y ayuda. Es gracias a esto que podemos conocer - mediante imágenes satelitales - como la contaminación lumínica ha sido y es hasta nuestros días, algo sin control. Pero sin duda, también nos da esa opción de ir - de forma segura - a lugares en donde esta dispersión lumínica no nos afectara del todo. En las siguientes imágenes podemos apreciar estos mapas, comenzando por parte del continente sud americano.
En el grafico que acompaña el mapa, se puede ver que el 80.0 es la cantidad de contaminación lumínica en alto grado, siendo el 15.0 en el que estamos inmersos como ciudades.
Parte de la zona central, Valparaíso, Chile.
Tomando fotografías.
Si ya de por si la observación es complicada en algunas ciudades, el practicar la fotografía astronómica se torna aún más compleja por los factores antes mencionados. Sobre todo, si contamos con cámaras especificas con larga exposición, aunque también algunos de los teléfonos móviles vienen con mejoras, muchas más que en versiones anteriores, igual se busca el mejor ángulo. A continuación, algunos ejemplos.
8 de octubre, 21:29, 2021 – Conjunción Luna – Venus, Comuna de Buin, Santiago, Chile.
Imagen gentileza: Marcela Vergara.
Venus, 23 de septiembre, 2021. Valparaíso, Chile. En
ambas imágenes el tono naranja aparece producto de las luminarias públicas. Metadatos: Punto F, f/8. Tiempo de exposición, 20 seg. ISO, 1600. Distancia focal, 18 mm. Programación de exposición, Manual.
Luminarias, cerro
Playa Ancha, Valparaíso.
En días nubosos es
posible apreciar de mejor manera la dispersión lumínica en parte de las alturas
de la ciudad de Valparaíso. Datos foto: Velocidad de obturación de 15 segundos.
ISO 400, f/2.8. 21:20 horas.
Este gráfico explica muy bien lo que han sido las
luminarias públicas y su impacto a nivel de luminosidad, claro que obviamente
existen todavía ciertos alumbrados que se contraponen a lo estipulado en esta
nota.
Afortunadamente existe preocupación en torno a esta situación, pero el mundo científico no ve con buenos ojos estas “soluciones” actuales. Tal como lo dijo el astrónomo José Maza: “Si seguimos así, de aquí a 20 o 30 años Tololo y Pachón no van a poder hacer astronomía de cierto tipo”, además acoto en el marco de una exposición en el año de 2019, “Las luces que apuntan al cielo están matando la astronomía en Chile”. Así de taxativo fue el premio de ciencias exactas, galardonado en el año de 1999.
A tener en cuenta.
Regulación de la Contaminación Lumínica (D.S.N°43/2012)
Desde 1998 Chile cuenta con una Norma de Emisión para la Regulación de la
Contaminación Lumínica, que aplica a las regiones de Antofagasta, Atacama y
Coquimbo.
Con esta norma se busca evitar la emisión de luz hacia el cielo y promover
la utilización de tecnologías que no emitan en el espectro no útil para el ojo
humano y que obstaculiza la observación astronómica. En 2012 se promulgó la
revisión de dicha norma a fin de establecer mayores exigencias, ampliar las
fuentes reguladas e incluir nuevas tecnologías de iluminación (D.S.N°43/2012
MMA).
- El
D.S.N°43/2012 está vigente desde el 4 de mayo de 2014. Esta norma
restringe la emisión de flujo radiante hacia el hemisferio superior,
además de restringir ciertas emisiones espectrales de las lámparas, salvo
aplicaciones puntuales que expresamente se indican.
- Las
fuentes emisoras son las lámparas, cualquiera sea su tecnología, que se
instalen en luminarias, en proyectores o por sí solas, que se utilicen en
lo que se denomina Alumbrado de Exteriores.
- También
se incluyen los avisos, letreros luminosos, proyectores u otros
dispositivos de iluminación posibles de ser movidos mientras se operan, y
otros similares. No se consideran como alumbrado de exteriores, por
ejemplo, la iluminación producida por la combustión de gas natural u otros
combustibles, la de los vehículos y las luces de emergencia necesarias
para la seguridad pública.
- Las
fuentes reguladas (luminarias) deben tener una certificación, emitida por
un laboratorio autorizado por la SEC.
- Las
fuentes instaladas a partir del 4 de mayo de 2014 deben cumplir
inmediatamente las nuevas exigencias. Por su parte, las fuentes existentes
antes de la entrada en vigencia de esta norma (es decir, que estaban
instaladas antes del 4 de mayo de 2014), tienen un plazo de 5 años para
iniciar el cumplimiento de la regulación, lo que significa que a partir
del 4 de mayo de 2019 la norma será exigible para todas las fuentes
reguladas en las regiones de Antofagasta, Atacama y Coquimbo.
- La
fiscalización de la norma la realiza la Superintendencia del Medio
Ambiente. Ir a la norma
Fuente: https://luminica.mma.gob.cl/norma-luminica/
Mirando la estrellas y planetas (en
la medida que podamos).
Antes de situarnos en algún punto
que consideremos apto para la observación estelar, es conveniente estar, por lo
menos, unos 10 minutos en un lugar oscuro, cerrado en lo posible o bien si no
contamos con esa posibilidad el poder usar lentes de sol para la adaptación de
nuestra vista a la oscuridad. También si usamos equipos, como por ejemplo
cámaras de fotos o de video, telescopios o binoculares, es conveniente para
manipularlos bajo una luz roja. Se sabe que el ojo es poco sensible a este tono
junto al color azul. Si desea saber más de este tema, visite: https://grlum.dpe.upc.edu/manual/fundamentosIluminacion-laVision.php
El patio o un balcón en altura,
puede ser ese lugar para deleitarnos, en la medida que podamos, del cielo estrellado.
Pero tal cual como mencione en las primeras líneas de esta nota, se nos pone
cuesta arriba nuestros gustos por la observación estelar. Pero una vez
instalados, junto a una taza de café, mantas - si la temperatura no nos
acompaña – podemos echar mano a algunos detalles que nos ayudaran en esos
momentos tan preciados.
- - Linterna con luz roja.
- - Mapa estelar, en lo posible en papel.
- - Lugar cómodo y de fácil manejo de equipos.
- - Si vamos a realizar fotografías, saber hacia
que punto se encuentran algunas ciudades, de esa manera no “ensuciaremos”
nuestra composición.
- - Cámaras fotográficas (réflex).
- - Binoculares, en los posible de 10 x 50 ya que
entra menos luz.
- - Conocer nuestro punto de desplazamiento, así
nos evitaremos algún accidente.
- - Alimentación, galletas, chocolates o café.
Si podemos contar con algunos de estos elementos y adoptando
los consejos, solo nos queda disfrutar de nuestra naturaleza y maravillarnos de
un espectáculo único. Bueno, salvo que este nublado, pero eso es harina de otro
costal.
Marcelo Moya S.
13 de octubre, 2021.
Agradecimientos:
Foto nocturna, comuna de Buin: Marcela Vergara.
Foto arte "Mailo", estrella fosforescente: archivo personal, Marcelo Moya
S.
Foto portada: Marcelo Moya S. Valparaíso, Chile.
Fuente gráfico alumbrado público: https://theilp.org.uk/publication/guidance-note-1-for-the-reduction-of-obtrusive-light-2021/
Mapa contaminación lumínica: https://www.lightpollutionmap.info/#zoom=2.55&lat=-39.2289&lon=-98.9615&layers=0BTFFFFFFFFFFFFFFFF
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